La confidencialidad en la información es fundamental para el manejo de casos sospechosos, confirmados y fallecidos por COVID-19 o Coronavirus. El manejo responsable de la información puede evitar que los pacientes sufran discriminación e incluso agresiones, señala un comunicado dado a conocer por el Ministerio de Salud Pública.
Este comunicado se da tras la publicación de la identidad de una de las víctimas fatales del cirus, cuya imagen fue portada hoy de este medio.
En este marco, la cartera sanitaria destaca que la carta magna establece que «la intimidad personal y familiar, así como el respeto a la vida privada, son inviolables».
Recuerda además que está vigente una resolución ministerial que establece que “el personal de salud tiene la obligación de respetar y de proteger los derechos a la intimidad y a la privacidad de las personas, por lo que en los servicios de salud queda terminantemente prohibido filmar o fotografiar a usuarios, sin su consentimiento”.
«Es importante que la ciudadanía comprenda la necesidad de resguardar la identidad de aquellas personas que dieron resultado positivo al COVID-19 y/o han fallecido a causa de esta enfermedad, como así también la de sus familiares, teniendo en cuenta la repercusión negativa que puede generar ese dato en la ciudadanía», señala el comunicado.
