Se trata del Dr. Rodolfo Mario Ritter, quien fue imputado por la fiscala Nilsa Torales, por los supuestos hechos punibles de Violación de la Cuarentena Sanitaria y Lesión Grave en Grado de Tentativa.
El profesional de la salud ingresó al país el 19 de marzo, luego de haber estado en el exterior y debía guardar cuarentena obligatoria, sin embargo, el mismo salió de su residencia en dos oportunidades para concurrir al sanatorio donde presta servicios médicos.
En ambas ocasiones, el Dr. Ritter habría acudido sin la utilización de tapabocas ni el cumplimiento de las medidas sanitarias dispuestas para el ingreso al centro médico, refiere el acta de imputación.
Además, para ese entonces ya se habría reportado el decaimiento de su salud al 154 (posible COVID-19), añade el escrito fiscal.
A consecuencia del hecho, varias personas que tuvieron contacto directo con el galeno fueron puestas en cuarentena obligatoria por las autoridades sanitarias. El Ministerio Público requirió la prisión preventiva del imputado.