La agente fiscal Ana Girala, imputó a los policías Derlis Sanabria y Juan Amarilla por los hechos de homicidio doloso en grado de tentativa, lesión corporal en ejercicio de función pública y Omisión de auxilio. La Fiscalía solicitó Prisión Preventiva.
Ambos están sindicados como responsables de los disparos realizados contra un automóvil que intentó eludir los controles en el marco de la cuarentena sanitaria.
Durante la balacera, un menor resultó herido de bale y se encuentra internado en estado grave en el Hospital del Trauma. El hecho ocurrió en Yvera, San Lorenzo, jurisdicción de la Comisaria Primera.
Ambos fueron convocados a prestar declaración indagatoria, pero se abstuvieron, los mismos se exponen hasta 30 años de cárcel.
Ambos fueron sometidos a la prueba de alcotest que resultó negativo, y pruebas de nitrito y nitrato. La agente fiscal pidió además imágenes de circuito cerrado de la zona e informes sobre la orden de trabajo de los efectivos a fin de indagar sobre el tipo de procedimiento que estaban realizando en el sitio donde se inició la persecución contra el móvil particular.
El vehículo, presumiblemente una Toyota Run (de color negro) recibió varios impactos de bala y uno de ellos hirió a un niño que se encontraba en el interior, en el asiento trasero.
El vehículo siguió unos km más deteniéndose en un lugar público donde el padre solicitó ayuda, testigos socorrieron al menor quien fue trasladado de urgencia para recibir asistencia médica.
La familia que se trasladaba con un bebé y un niño regresaba a su casa anoche, cuando fue interceptada por dos efectivos policiales, el hombre a fin de no ser multado evadió el control y fue perseguido por ambos uniformados, en un trayecto de casi 8 km, durante el cual se produjeron los diferentes disparos contra el Toyota particular.