Imputan a 4 personas por presunta venta ilegal de municiones y armas de uso militar

Se trata de Francisco Javier Sosa Noceda, Víctor Hugo Franco (Suboficial de Transporte), Cristhian Eduardo Soto Fox (Sargento ayudante de la Dirección de Material Bélico) y Fabio de Jesús Giménez Giménez, imputados por el Fiscal Marcelo Pecci, por la supuesta comisión de los hechos punibles de Detentación, Tráfico ilícito de armas de fuego y acopio y Asociación Criminal.

Pecci pidió al Juzgado Penal de Garantías la prisión preventiva para los imputados.

El reporte del Ministerio Público indica que los mismos integrarían una banda dedicada a la comercialización y tráfico de armas de fuego y objetos vinculados a ello, así como la tenencia de las mismas. Habrían realizado actividades inherentes a la posesión de importantes cantidades de armas de fuego irregulares, municiones, componentes, accesorios y afines, con riesgo para la seguridad interna del país, para comercializarlas y traficarlas contra la ley, presuntamente a grupos criminales que operan, principalmente, en la frontera norte y este de la República del Paraguay y en el exterior del país.

El fiscal reveló que una de las armas pertenece a las fuerzas Armadas de la Nación.

Resaltó que hay muchas formas de introducir al país las armas, incluso, se puede importar piezas y ensamblar luego para la venta.
«Como referencia un arma Fal saldría no menos de 12.000 dólares. Los detenidos son parte de un grupo y con la investigación se conectará con otras personas», puntualizó el fiscal Marcelo Pecci.

Antecedentes

El agente fiscal Marcelo Pecci encabezó un operativo que derivó en la detención de 4 hombres (2 de los cuales son militares) presuntamente involucrados en la venta ilegal de material de uso militar.

Fue allanado un depósito ubicado en Cuarto Barrio, ciudad de Luque, en el que se ocultaban armas y municiones presumiblemente robadas, para su venta a organizaciones criminales del norte y la triple frontera.

Del sitio igualmente se confiscó una gran cantidad de armamentos, específicamente fusiles, una ametralladora liviana FAL propiedad del Ejército, pistolas, cargadores y proyectiles.

El procedimiento se llevó a cabo producto de un trabajo de detección de conexiones entre los traficantes de armas y los receptores.