Una encomienda aérea que tenía como destino Tailandia, fue verificada por agentes especiales de la SENAD en el Aeropuerto Silvio Pettirosi, ante la reacción de un can detector de drogas, que indicó la posible presencia de drogas en su interior.
Hoy se procedió a la apertura del paquete que contenía una hamaca y una manta, tejidos artesanalmente. Los intervinientes realizaron análisis primario de campo a los tejidos y de esa forma detectaron que se encontraban impregnados de cocaína.
En este marco, según informaron desde la SENAD, el agente fiscal Ysaac Ferreira dispuso la incautación de las evidencias. Ahora resta indagar acerca del origen y destino de la droga, para lo cual los antidrogas ya se encuentran abocados.
La impregnación de prendas o telas es una modalidad bastante
común en el ámbito de los envíos ilícitos de drogas. Una vez en su destino, la sustancia es disuelta y extraída de las mismas para su posterior comercialización.
