Luego de una serie de incidentes entre manifestantes y la policía nacional que se encontraba resguardando la seguridad del edificio del poder legislativo, los uniformados procedieron a incautar todo tipo de elementos contundentes que portaban los manifestantes.
En este contexto, se procedió al retiro de palos, flechas, y balitas que eran utilizados por los campesinos e indígenas que se encuentran frente al Congreso Nacional exigiendo que la cámara de diputados rechace el proyecto que modifica el artículo 142 del código penal que eleva los años de condena a invasores de propiedades privadas.
Cabe destacar que, durante los disturbios, los manifestantes quemaron 3 automóviles y una motocicleta de la policía nacional, mientras un cuarto vehículo quedaron con parabrisas roto.