Fue durante la apertura oficial de la Reunión de Jefes de Estado y de Gobierno y altas autoridades del Foro para El Progreso y la Integración de América del Sur (PROSUR).
“Celebro recibirlos en Paraguay y mantener este espacio de diálogo en el marco del Foro para el Progreso e Integración de América del Sur (PROSUR), que se ha constituido en una instancia que, sin abanderarse con ideologías políticas, aspira a dar respuestas a los desafíos comunes que enfrenta nuestra región”, dijo el mandatario paraguayo.
Tras someter a consideración el orden del día del encuentro y no habiendo objeciones, se dio poraprobado el orden del día.
El presidente Abdo Benítez prosiguió señalando que el propósito fundamental de este encuentro es dar seguimiento a las iniciativas en diversas áreas, como las de la salud, tránsito de personas, medio ambiente, defensa, energía, gestión de riesgo, infraestructura y de seguridad, a fin de avanzar en el intercambio de experiencias y buenas prácticas para fortalecer nuestras instituciones y facilitar el acceso al conocimiento.
No obstante, dio el énfasis de esta reunión en la lucha contra el crimen organizado transnacional, que se ha convertido en un enemigo común que debemos combatir con un compromiso al más alto nivel y ante el cual debemos unir fuerzas para erradicarlo.
Indicó que en las últimas décadas nos hemos embarcado en esfuerzos de integración que registraron importantes logros, sin embargo, estos no han sido lo suficientemente eficaces para impedir el avance de este flagelo.
Dijo, igualmente, que la globalización, el desarrollo tecnológico y la creciente interdependencia de los países potenció la trata de personas, el tráfico ilegal de armas y drogas, el terrorismo y el lavado de activos.
“El gran desafío que enfrentamos es desarrollar herramientas conjuntas para dar una respuesta regional coordinada, a fin de combatir las amenazas a la seguridad en sus diferentes dimensiones”, remarcó.
Indicó que fortalecer la capacidad de respuesta de las fuerzas del orden público es un imperativo para nuestros gobiernos, con miras a luchar contra los grupos criminales transnacionales, cuyos recursos superan los nuestros.
Recordó el asesinato del fiscal Marcelo Pecci y señaló que en fechas recientes fuimos testigos de que la criminalidad no reconoce fronteras ni respeta jurisdicciones, exponiendo un desprecio absoluto hacia la vida humana y que por ello es necesario dar un mensaje contundente para enfrentarla, mediante una lucha que articule e integre todos los estamentos de nuestros Estados y las diferentes instancias de seguridad.
“Creemos que, en base a la experiencia adquirida, debemos fortalecer el proceso de intercambio de cursos de acción que podríamos adoptar en forma conjunta para constituir un frente regional unido y sólido que pueda generar una red de alianzas, basada en la confianza mutua, fomentando un abordaje amplio que permita combatir esta problemática en su compleja dimensión”, concluyó. Fuente: Cancillería