En declaraciones a radio 1000, el exsenador y candidato a la cámara alta por la disidencia del Partido Liberal cuestionó duramente «el mandato partidario» sobre la obligación de acompañar el juicio político a la Fiscal General del Estado, Sandra Quiñonez.
En este contexto, aseguró que «Efraín Alegre no es el dueño del Partido Liberal» y añadió que «hay que aprender a respetar a la gente que piensa de manera diferente. “La constitución nacional es muy clara, los diputados y senadores no están sujetos a mandatos imperativos”, destacó.
«Forman parte del equipo de cómplices que avalan sobrefacturaciones, pliegos amañados y compras irregulares», resaltó.
«Efrain Alegre se pasa haciendo el ridículo, amenazando, con el apoyo de sus lacayos que son huérfanos también, al igual que Desirée Masi, Kattya González, Guillermo Ferreiro. Él no se anima a enfrentarnos cara a cara en el Directorio», enfatizó el candidato a senador del PLRA.
Dijo que están llevando adelante el proceso «a tambor batiente».
Cuestionó que «los fracasados de siempre» que, según Amarilla, «recurren a la formula fallida, donde están prescindiendo de actores importantes del partido», desde el punto de vista de «dialogar y acordar el momento oportuno para plantear el juicio político, que llevan adelante a tambor batiente».
Finalmente, indicó que «para Efrain Alegre es rentable fungir de candidato y después quedarse en su casa a disfrutar de un periodo sabático prolongado».
