El 10 agosto iniciaba el desplazamiento de las fuerzas compuestas por la SENAD, la FTC, la Policía Federal del Brasil y el fiscal Celso Morales hacia zonas de incidencia del tráfico de marihuana, las mismas estuvieron concentradas en Cerro Kuatia y Rosalina del departamento de Amambay. En resultados globales la operación dejó a su paso la anulación de 610 toneladas de la droga y altos costos en pérdidas a sectores narcos con cifras que rondan los 18 millones de dólares.
Los helicópteros de la Fuerza Aérea y la Policía Federal del Brasil otorgaron facilidades en la cobertura operativa para la colocación de los equipos en los terrenos estratégicos. Estos grupos de trabajo lograron erradicar un total de 197 hectáreas de marihuana equivalentes a 591 toneladas de la hierba que no han ingresado al circuito de tráfico nacional ni regional.
En cuanto a otros importantes hallazgos, se detectaron y destruyeron un total de 56 campamentos que aunque precarios, ofrecían lo necesario para emplear la custodia y la producción de toneladas de la hierba. Bajo las estructuras se conservaban 19 mil kilos cannabis listo.
Atacar a las fuentes financieras del narcotráfico desde el origen, continúa siendo una férrea estrategia configurada por la SENAD y la Policía Federal del Brasil. “Nueva Alianza XXXIII” provocó un daño económico a las organizaciones criminales de al menos 18,3 millones de dólares americanos.
