Varios diputados utilizaron el espacio de oradores en el pleno de la cámara baja para repudiar la falta de un protocolo para este tipo de situaciones y afirmaron que lo acontecido en el Buen Pastor deja la impresión de que las cárceles de nuestro país son manejadas por los convictos.
Fue en referencia al ingreso del féretro de Osvaldo Villalba en el penal de mujeres de la casa del Buen Pastor, por pedido de la condena por secuestro y asesinatos Carmen Villalba.
En este marco, la vicepresidenta segunda, Norma Camacho lamentó la falta de un ordenamiento, situación que vuelve a dejar en evidencia al gobierno, según dijo.
Insistió en la necesidad de trabajar por políticas públicas que sean eficientes para una mejora integral de la administración pública.
“Es inadmisible la situación de privilegio que se ha dado. No hemos recibido explicación alguna sobre el hecho y lamentamos la afrenta hacia las personas que hoy tienen familiares secuestrados”, refirió.
En la misma línea se pronunció la diputada Kattya González, quien acotó que la clase política tiene una gran deuda con el sistema penitenciario y de seguridad.
Afirmó que la serie de denuncias y el significativo aumento de la criminalidad hablan a las claras de esta situación. Con informe de Diputados
