A criterio del senador Sixto Pereira, el ministro de Justicia Daniel Benítez debió ser destituido, tras el bochornoso suceso ocurrido ayer en el interior del penal de Tacumbú.
Agregó que es inadmisible que un preso ligado a hechos de narcotráfico pague para acceder a fiestas improvisadas dentro de su lugar de reclusión.
«No es extraño, es rutina de la corrupción y tráfico de influencias, dentro del penal, entre el preso, el director y el ministro, cuando pagan para este tipo de cosas. No se puede alegar desconocimiento, se pagó para conseguir el permiso el ministro debió ser removido del cargo», resaltó el legislador.
Añadió que el 99% de los presos están acinados por robo de gallina, en pésimas condiciones, pero los «narcos» o más «poderosos» gozan de buena salud.
«Si el ministro no es removido del cargo, el congreso debe interpelar al ministro y sentar posición política de repudio a los hechos», sentenció.
