En el marco del 32º período de sesiones de la Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal de las Naciones Unidas, el ministro de Justicia de la República del Paraguay, Alberto Daniel Benítez, pronunció un discurso destacando la importancia de fortalecer la cooperación regional para combatir el tráfico de drogas y abordar los desafíos de la criminalidad organizada en la región. Acompañado por la directora de Asuntos Internacionales, Claudia Sosa, el ministro resaltó los esfuerzos de Paraguay en la prevención del delito y la justicia penal, y reafirmó su compromiso con la implementación efectiva de la Declaración de Kioto y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Durante su intervención, el doctor Benítez expresó su reconocimiento a la Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal por su trabajo en la promoción de la cooperación internacional para prevenir y combatir eficazmente la delincuencia en todas sus formas. Asimismo, destacó los desafíos derivados de la pandemia de COVID-19 y cómo estos han fortalecido la solidaridad y cooperación entre los países.
En particular, el ministro resaltó los esfuerzos conjuntos entre Paraguay y Brasil para combatir el tráfico de drogas, tomando en cuenta la actuación de los grupos de criminalidad organizada de Brasil en el sistema penitenciario paraguayo y la creciente disputa por las rutas de tráfico de drogas en la región de la triple frontera. En este sentido, se enfatizó el fortalecimiento de la cooperación regional, el intercambio de información y experiencias, así como la implementación de medidas de gestión penitenciaria adaptadas a las necesidades.
También destacó la importancia de la asistencia técnica proporcionada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), en particular el proyecto «Crimen organizado en las cárceles y el narcotráfico desde una perspectiva regional». Esta iniciativa ha permitido consolidar la cooperación con la máxima instancia judicial en el ámbito de la prevención del delito y la justicia penal.
En cuanto a las medidas adoptadas por el Gobierno paraguayo, el ministro mencionó estrategias de prevención del delito adaptadas a las necesidades, la incorporación de la perspectiva de género en la prevención del delito, la atención a la infancia y la juventud en la prevención de la delincuencia, la mejora de las condiciones en los establecimientos penitenciarios, la reducción de la reincidencia mediante la rehabilitación y la reintegración, el acceso a la asistencia jurídica, la implementación de políticas nacionales de imposición de penas, y la promoción de la cooperación internacional y la asistencia técnica.
El ministro de Justicia concluyó su discurso reafirmando el compromiso de la República del Paraguay en la implementación efectiva de la Declaración de Kioto y resaltando la importancia de la colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en los esfuerzos emprendidos por el Gobierno Nacional para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.