El partido fundado por el ex presidente pondrá la “mano de obra” que La Libertad Avanza no tiene para controlar el acto electoral. Ya comenzaron los llamados a los militantes con la intención de superar los 100.000 colaboradores.
El acuerdo que propició Mauricio Macri con Javier Milei, y que transparentaron Patricia Bullrich y Luis Petri, empieza a decantar hacia abajo. Mientras los dirigentes de uno y otro espacio se posicionan públicamente apoyando o no y se desata una fuerte interna en Juntos por el Cambio que parece camino a la ruptura, el aparato electoral del PRO comienza a ponerse en marcha.
La intención de los que estuvieron coordinando la campaña y el proceso electoral de Bullrich es la de juntar a los militantes necesarios para poder fiscalizar una elección que entienden como trascendental. Los contactos ya comenzaron porque quieren tener dos encuentros de capacitación. “Aunque la mayoría ya pasó por el proceso electoral, ahora hay que dejar bien en claro cómo se tienen que contabilizar los votos positivos, los nulos y los blancos”.
Sin embargo, lo más importante es alcanzar el número necesario. “Sabemos que vamos a tener bajas de los sectores que no acompañan el acuerdo con Milei, aunque creemos que ahora que habló Mauricio Macri y que el enfrentamiento con el kirchnerismo ya es cuerpo a cuerpo, esa caída será muy chica”, explicaron desde el centro de campaña a Infobae.
Fuente: Infobae.com