«Paraguay es un país comprometido con el libre comercio y una economía verde y sostenible», destacó el presidente Santiago Peña, durante su conferencia brindada en la Comisión Económica para América Latina (Cepal) este martes.
El mandatario inició su ponencia destacando el rol de la Comisión para el progreso de América Latina y el Caribe desde su creación 75 años atrás, y destacó su aporte actual para impulsar un comercio inclusivo y reducir las desigualdades de género en la región.
Presentó al Paraguay como «uno de los países más abiertos para el comercio» y con un gran potencial para la producción de energía sostenible.
«Para los países en desarrollo el comercio exterior es clave para la generación de empleo y prosperidad, por lo que consideramos inaceptables medidas proteccionistas como barreras arancelarias y no arancelarias que muchos países hoy siguen aplicando», dijo. Agregó que el comercio no debe estar «subordinado a intereses geopolíticos mezquinos» ante competidores legítimos que respetan las normas del comercio internacional justo.
Producción de energía verde
El presidente también recordó que Paraguay es uno de los países con mayor producción de energía renovable per cápita del mundo. Señaló que el objetivo de su Gobierno es impulsar la producción de hidrógeno verde y convertir al país en «un hub logístico para la producción a gran escala y a precios competitivos».
Indicó que el cambio climático y sus efectos son un gran desafío a nivel global, aunque la protección del medio ambiente no debe implicar renunciar a oportunidades de expansión comercial, generación de empleos y creación de riquezas, acotó.
«La preocupación real y común que tenemos sobre el medio ambiente no debe verse empañada por medidas cuyos objetivos sean distintos a los de su protección, convirtiéndose en medidas comerciales que se vuelven en restricciones económicas injustas y discriminatorias que generan descontento e incertidumbre en los países en desarrollo», dijo.
«Los países en desarrollo no pueden asumir la responsabilidad de los daños ambientales causados por la industrialización de los Siglos XIX y XX cuando no existían medidas de mitigación», agregó, y señaló que no se han cumplido con principios fundamentales del Acuerdo de París, tales como «responsabilidades compartidas pero diferenciadas», «transferencia de financiamiento y tecnología» y «consideración de amenazas basadas en medios científicos». Fuente: Ip