Fiscal imputó a dos libaneses y un brasileño por ingreso de drogas en el penal de CDE

El fiscal Manuel Rojas Rodríguez imputó a tres reclusos extranjeros que se encargaban de meter drogas y otros productos prohibidos dentro de la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este para su posterior comercialización. Ellos son los libaneses Ali Issa Chamas (42) y Ali Fouani (32) y el brasileño Diego Pedro Barcik (34), quienes enfrentan cargos por tenencia, suministro y comercialización de estupefacientes sin autorización en lugares de prisión, en concurso con asociación criminal para cometer hechos punibles contra la Ley de drogas.

 

Según la investigación, los ahora imputados se habrían unido organizadamente con el objeto de adquirir, ingresar, distribuir y comercializar sustancias estupefacientes y otras mercancías prohibidas dentro de la Cárcel Regional, lugar en donde los mismos guardan reclusión.

El grupo estaría liderado y organizado por Ali Issa Chamas, quien habría coordinado y financiado el ingreso de sustancias estupefacientes a la prisión. Mientras, Ali Fouani sería el encargado de coordinar las actividades del grupo, y Diego Pedro Barcik sería la mano derecha del líder y encargado de la logística para la adquisición e ingreso de las drogas dentro del penal.

A su vez, los coimputados, el director de la institución, Rubén Ireneo Lombardo Cristaldo, y el coordinador general Francisco Javier Ramírez Torres, presumiblemente utilizaban su posición o cargo para facilitar y brindar cobertura a las operaciones de la organización criminal a cambio de cuantiosas sumas de dinero.

Los citados funcionarios estatales también están procesados por transgresión de la Ley de drogas y actualmente se encuentran recluidos en el penal de Coronel Oviedo. Igualmente, está imputado el guardiacárcel Héctor Fredy Mendoza Báez por estar vinculado a los hechos.

El descubrimiento de los hechos punibles tuvo lugar el 12 de diciembre de 2023, tras un allanamiento fiscal-policial de la sede de la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este. Las autoridades, encabezadas por Rojas Rodríguez, encontraron en una celda tipo vip -que pertenecería al condenado por narcotráfico Ali Issa Chamas- un compartimiento oculto en el que se ubicaron varios paquetes que contenían estupefacientes.

En total, se incautaron 4,940 kilos de marihuana en diferentes presentaciones y dosificaciones. En la celda vip funcionaban además varios negocios explotados por el grupo comandado por  Ali Issa Chamas, como ser barbería, bar, restaurante, privadas, etc.

Las autoridades creen que la droga incautada es solo una pequeña parte de un cargamento mayor que habría ingresado al penal con la complicidad de los responsables del lugar.

Además, el fiscal Manuel Rojas ordenó protección policial para resguardar a la persona que denunció la presencia de esta organización delictiva dentro de la prisión, así como a su familia. Esta medida se tomó ante la posibilidad de que puedan ser blanco de posibles atentados por parte de criminales vinculados al tráfico de drogas dentro del centro penitenciario.