Varios diputados firmaron un proyecto de Ley “Que establece la obligatoriedad de la clasificación y tipificación de canales bovinas en todos los frigoríficos y mataderos habilitados para el consumo interno en la República del Paraguay”, con el propósito de garantizar transparencia, calidad y equidad en el mercado cárnico nacional.
Surge ante la ausencia de un marco regulatorio que estandarice la calidad de la carne destinada al consumo interno, a diferencia de lo que ocurre con los productos para exportación, regulados por el Decreto Nº 2746/2024 y las resoluciones del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (SENACSA), indicaron los proyectistas.
La propuesta establece que todos los establecimientos deberán clasificar las canales bovinas (cuerpo de un animal sacrificado, específicamente después de ser desollado, eviscerado y desangrado) según la Norma Paraguaya NP 20 036 22, considerando parámetros como sexo, edad, conformación, cobertura de grasa y grado de contusiones.
Además, introduce un sistema de etiquetado obligatorio que incluirá datos como la fecha de faena, categoría y tipificación, con un distintivo especial para las canales de categoría “Premium”.
Estipula, igualmente, que la implementación será gradual, comenzando por los frigoríficos de mayor capacidad en el primer año y extendiéndose a los de menor capacidad en un plazo de tres años.
El documento destaca, por otro lado, que la ley busca modernizar el mercado cárnico paraguayo, alineándolo con estándares internacionales. “No podemos permitir que nuestra población consuma carne de baja calidad a precios elevados. Este proyecto promueve una alimentación digna y saludable como un derecho, no como un privilegio”, se afirma en la fundamentación del proyecto.
Incentivará además prácticas de producción más eficientes, mejorará la trazabilidad y fortalecerá la confianza del consumidor.
Establece, igualmente, que SENACSA será la autoridad encargada de fiscalizar el cumplimiento de la ley, capacitar al personal técnico y actualizar los criterios técnicos.
“Los frigoríficos deberán entregar certificados de clasificación a los proveedores y conservar los registros por al menos dos años. El incumplimiento estará sujeto a sanciones sanitarias, comerciales y de protección al consumidor”.
Finalmente, la exposición de motivos indica que la carne bovina es un pilar de la dieta y la economía paraguaya, pero que los altos precios en el mercado interno, influenciados por los valores internacionales y la falta de regulación, han generado críticas importantes en los últimos tiempos.
“El proyecto busca corregir estas distorsiones, asegurando que los cortes de consumo interno, como costilla o puchero, reflejen su calidad real en el precio”, refiere el documento.
Son firmantes de la iniciativa parlamentaria los diputados Santiago Benítez (ANR-Amambay); Juan Manuel Acevedo (PLRA-Amambay); Liz Acosta (ANR-Alto Paraná); José Domingo Adorno (ANR-Alto Paraguay); Benjamín Cantero (ANR-Canindeyú); María Ida Cattebeke (ANR-Pdte. Hayes); Jatar Fernández (Independiente-Central); y Saúl González (ANR-Central).
Fuente: Diputados