Tras la solicitud remitida por el Comandancia de la Policía Nacional, la jueza Viviana López hizo lugar al petitorio y autorizó a la Policía Nacional a iniciar el proceso de destrucción de automóviles y motocicletas abandonadas y que se han convertido en el tiempo en verdaderas chatarras, que a su vez hoy son criaderos de mosquitos.
Estos vehículos se encuentran en corralones y predios de las diferentes comisarías del país, y algunos de ellos llevan años en el sitio y hoy se encuentran envueltos en malezas, lo que se constituye en un verdadero problema, atendiendo la gran cantidad de casos de dengue que se reporta a nivel nacional.
La magistrada, según el escrito, entiende que estos vehículos abandonados se convierten en verdadera amenaza para la población.