Tras la incautación de más de 40 millones de cajetillas de cigarrillos, la Dirección Nacional de Aduanas trabaja en la detección de la legalidad o no de las precintas de las cajetillas, ya que con eso se demostrará si se abonó el impuesto respectivo.
Para el efecto se procederá a la realización de un peritaje, lo que a su vez determinará sobre la legalidad o no del producto.
De momento, y hasta que la Dirección Nacional de Aduanas se pronuncie al respecto, el cargamento permanecerá en los depósitos del Ministerio Público, ante la sospecha de posible contrabando.