Familiares de las personas privadas de libertad (PPL) que ya cuentan con turnos, podrán ingresar a los centros penitenciarios mediante la implementación de las visitas inteligentes, que consiste en el seguimiento del protocolo establecido por el Ministerio de Justicia (MJ) acorde a la regulación del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
En una primera etapa, el protocolo será implementado únicamente en las penitenciarías, quedando pendiente los centros educativos.
En este marco, el Ministerio de Justicia aprobó un “Protocolo para la admisión de visitas sociales a las personas privadas de libertad (PPL) y adolescentes en conflicto con la ley penal (ACLP) en centros penitenciarios y educativos, en el marco de la emergencia sanitaria ante la pandemia del covid-19”. Además del lavado de manos y el uso de tapabocas, se establecen puntos que deben ser considerados para el ingreso de los visitantes.
Para el efecto, se dispone de un sistema de agendamiento informático de adentro para afuera, es decir, las personas privadas de libertad deben comunicar los datos del visitante y la administración de cada penal se pondrá en contacto con el familiar comunicando el turno que le toque. Las personas que no figuran en el sistema, no podrán ingresar.
El protocolo establece que no ingresarán las personas con temperatura igual o superior a 37.5 °C o antecedentes de fiebre en las últimas 24 horas, tampoco podrán entrar si cuentan con cuadro respiratorio (tos, estornudos, rinorrea, dolor de garganta), los adultos mayores de 65 años, menores de 18 años de edad y mujeres embarazadas o que se encuentran en periodo de lactancia. Los visitantes no deben llevar encomiendas.
El espacio para las visitas sociales deberá permitir el distanciamiento físico mínimo de dos metros y sólo será admitida un visitante por persona privada de libertad o adolescente en conflicto con la ley penal.
El horario habilitado será como máximo de tres horas por día y durará entre 40 y 45 minutos, debiendo el visitante retirarse una vez cumplido el tiempo.