La empresa Transporte Internacional Guarany S.R.L. denuncia que conductores de sus camiones de transporte de cargas reciben tratos degradantes e inhumanos en territorio argentino y aseguran que los conductores son sometidos a travesías ininterrumpidas de hasta 18 horas, que son obligados a permanecer en sus vehículos y que no pueden descender ni siquiera para hacer sus necesidades fisiológicas.
Esto genera una situación preocupante ya que deriva en cansancio físico y estrés que exponen a los conductores al no estar lo suficientemente descansados como para llevar adelante con seguridad los largos y extenuantes viajes, según refirió Diego Lemos, referente del sector.
Incluso sostienen que todos sus camiones son escoltados y vigilados de manera permanente por autoridades de Gendarmería, bajo el argumento de controles sanitarios en el marco de la Pandemia del COVID19.
Ante esta situación la empresa remitió una nota al Ministerio de Relaciones Exteriores donde pide la intervención de las autoridades paraguayas para subsanar esta situación.
Remarcan que la empresa cumple cabalmente con todas las normas sanitarias nacionales e internacionales previstas para el COVID19. Incluso los choferes cuentan con un kit sanitario conforme al Protocolo de Vigilancia Sanitaria en Frontera.
Advierten que las medidas impuestas en territorio argentino, no se hallan fundadas en ningún protocolo o recomendación médico-científica, sino que es más bien un castigo y no guarda ninguna relación con el fin perseguido que es evitar la propagación del COVID-19.
Sostienen que es una medida que genera otro tipo de riesgos, ya sea para la salud de los connacionales, así como para la seguridad de los propios argentinos al hacer circular vehículos de gran porte por más 18 horas seguidas.
Ante esta situación consideran que las medidas impuestas por la República Argentina violan los acuerdos de libre circulación tanto del MERCOSUR y de la Organización Mundial del Comercio.