Comunicado mediante, la Conferencia Episcopal Paraguaya exhortó a los miembros de la Cámara de Diputados a enmendar el error cometido en abierta violación de la Constitución Nacional en lo que hace a la sanción impuesta a la Diputada Celeste Amarilla.
Es “con el objetivo de contribuir al discernimiento sobre las acciones de los que ejercen cargos de representación política”, expresa una parte del documento.
Pidió a la clase política lo que establece nuestra carta magna y las leyes de la república.
El texto añade que “una auténtica democracia es posible solamente en un Estado de derecho y sobre la base de una recta concepción de la persona humana”.
“Quienes tienen responsabilidades políticas no deben olvidar o subestimar la dimensión moral de la representación, que consiste en el compromiso de compartir el destino del pueblo y en buscar soluciones a los problemas sociales. En esta perspectiva, la autoridad responsable ejerce el poder con espíritu de servicio, teniendo como finalidad de su actuación el bien común y no el prestigio o el logro de ventajas personales”, subraya otra parte del comunicado difundido en la fecha por la oficina de Comunicaciones de la CEP y que lleva la firma de monseñor Amancio González.