El mandatario electo por los guatemaltecos debe ser juramentado en el Teatro Nacional pero la ceremonia está atrasada porque el Congreso, controlado por partidos afines al presidente saliente, Alejandro Giammattei, mantiene detenido el proceso de acreditación de los diputados electos y reelectos.
Bernardo Arévalo debe ser juramentado en el Teatro Nacional pero la ceremonia está atrasada porque el Congreso, controlado por partidos afines al presidente saliente, Alejandro Giammattei, mantiene detenido el proceso de acreditación de los diputados electos y reelectos.
El Parlamento no ha logrado ponerse de acuerdo en la elección de la nueva junta directiva y discute si declarar a la bancada de Arévalo “independiente”, en virtud de una orden judicial de suspensión del partido Movimiento Semilla.
Si los diputados son declarados “independientes” no pueden integrar la junta directiva ni presidir comisiones paralamentarias.
Según la Constitución de Guatemala, el traspaso presidencial debe ocurrir a las 16H00 (22H00 GMT), incluso si no hay acto protocolario de juramentación.
La ceremonia de asunción ya debió haber empezado.
Ante esta situcació irregular, los cancilleres asistentes a la toma de posesión han sido convocados a una reunión urgente por el ministro de Relaciones Exteriores y Culto de Costa Rica, Arnoldo André, reveló el mandatario colombiano, Gustavo Petro.
“Los diputados tienen la responsabilidad de respetar la voluntad popular expresada en las urnas. Se está intentando vulnerar la democracia con ilegalidades, nimiedades y abusos de poder. El pueblo guatemalteco y la comunidad internacional están observando”, afirmó Arévalo.
La incertidumbre se ha ido adueñando de la situación en el Parlamento, mientras cientos de adherentes a Arévalo se concentraron en los alrededores del Congreso para protestar por estas maniobras dilatorias.
Al evento están invitados nueve jefes de Estado, entre ellos el rey de España, Felipe VI, y los presidentes de Chile, Gabriel Boric; Colombia, Gustavo Petro, y Panamá, Laurentino Cortizo, entre otros, además del Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
Fallo Corte Constitucional
Más temprano, la Corte de Constitucionalidad de Guatemala, máximo tribunal del país, dictaminó este domingo que el partido Movimiento Semilla, del presidente electo, Bernardo Arévalo de León, está suspendido.
La decisión, confirmada por varias fuentes, deja sin posibilidad al Movimiento Semilla de formar parte de la junta directiva del Congreso para el periodo 2024-2025.
De igual forma, el dictamen establece que los 23 diputados de la agrupación política de Arévalo de León deben ser independientes para el periodo 2024-2028, sin partido político, pese a que en 2023, la misma corte ya había ordenado que todos los funcionarios electos en los comicios del año anterior tomaran posesión como fueron electos.
La suspensión nace de una orden penal del pasado 12 de julio, dictada por parte del juez Fredy Orellana, acusado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos de socavar la justicia y de corrupción.
El caso penal a cargo de Orellana obedece a un supuesto caso de firmas falsas en la fundación del Movimiento Semilla en 2018.
Desde que Arévalo de León obtuvo el segundo lugar en las elecciones presidenciales de junio de 2023, el Ministerio Público (Fiscalía) de Guatemala empezó una persecución judicial para evitar que el académico, de 64 años, tome posesión, al igual que los diputados del Movimiento Semilla.
El Congreso guatemalteco suspendió en agosto al partido de Arévalo de León, pero dicha decisión provocó que la presidenta del Organismo Legislativo, Shirley Rivera, fuera posteriormente también sancionada por Estados Unidos.
El pasado 1 de septiembre, Arévalo de León acusó a la fiscal general Consuelo Porras y al juez penal Orellana de intentar un “golpe de Estado” para evitar que tome posesión de la presidencia el próximo 14 de enero.
Las acciones judiciales de Porras han provocado multitudinarias protestas y bloqueos de carreteras por parte de la población para exigir su renuncia desde octubre a la fecha y Arévalo de León ha advertido que a partir de mañana le pedirá su dimisión.
El presidente electo debe ser investido este domingo por un período de cuatro años en reemplazo del actual mandatario, Alejandro Giammattei.
“Aquí lo que están haciendo es dilatando la instalación del Congreso en su décima legislatura porque no quieren darle posesión a Arévalo”, dijo a periodistas Castillo, del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), de la ex primera dama Sandra Torres, derrotada por Arévalo de León en los comicios de 2023.
La juramentación del nuevo Congreso guatemalteco para el periodo 2024-2028, compuesto por 160 diputados, debe realizarse este domingo para poder, después, dar paso a la investidura del presidente electo, Bernardo Arévalo de León.
“Se está fraguando el golpe de Estado”, añadió Castillo, legislador de oposición al Gobierno que preside actualmente Alejandro Giammattei.
Arévalo afirma que “no podrán” detenerlo
En medio de la tensión en el Legislativo, el presidente electo sostuvo en mensajes en sus redes sociales que “la Constitución será honrada y habrá un cambio de Gobierno” en Guatemala.
“Mi compromiso con Guatemala está más fuerte que nunca. Avanzaremos y no podrán detenernos”, expresó Arévalo en un mensaje en X (antes Twitter), en el que agradece al expresidente de Uruguay Pepe Mujica un saludo.
Fuente: Infobae.com