Óscar “Nenecho” Rodríguez renunció este viernes al cargo de Intendente de Asunción, debido a la intervención a que fuera sometida su administración por la Cámara de Diputados, y que recayó en el economista Carlos Pereira.
En su mensaje de despedida, realizó un repaso de sus casi diez años de labor en la función pública municipal, con cinco en la Junta Municipal y otros cinco en la Intendencia, oportunidad en que destacó logros, dificultades enfrentadas y obras que marcan un antes y un después en la ciudad.
Recordó que asumió la conducción del Municipio el 20 de diciembre de 2019, en plena antesala de la pandemia, un escenario inédito que afectó profundamente a la población.
Aseguró que su gestión estuvo validada en las urnas con más de 123.500 votos, lo que lo convirtió en el intendente más votado en la historia de Asunción.
“Enfrentamos a toda la oposición unida y a las estructuras mediáticas adversas, pero los asuncenos apostaron a este proyecto. Esa confianza la llevamos siempre como un compromiso inquebrantable”, señaló.
Rodríguez subrayó que el mayor cambio de enfoque de su administración fue la decisión de apostar a obras de infraestructura, que perduren en el tiempo, y no solo a acciones superficiales.
En ese sentido, mencionó como hitos de gestión, entre otros puntos, la construcción de desagües pluviales en puntos críticos como; avenida Molas López, barrio San Pablo–Abasto, Varadero, Rocío Cabriza, Lombardo–IPS, General Santos y San Antonio. Habló del avance de proyectos en barrios como Carmelitas, Santo Domingo y la zona del Banco Central, que mejorarán la calidad de vida de miles de vecinos.
Mencionó la atención a comunidades históricamente postergadas: en el Bañado Sur se trabaja en soluciones habitacionales definitivas con apoyo del Gobierno Central, mientras que en la Chacarita Alta ya fueron inauguradas 54 viviendas. La donación de terrenos municipales para la construcción del Gran Hospital de Asunción en la Costanera Sur, considerado un proyecto clave para la salud de la capital.
Dedicó un espacio especial a los funcionarios de la Comuna, a quienes definió como sus compañeros de trabajo y no sus subordinados.
“Yo solo fui un conductor ocasional de este tren. El tren va a continuar y ustedes deben cuidar de esta institución, que les da sustento a sus familias. Siempre den el mayor esfuerzo en beneficio de la ciudadanía”, exhortó.
Un llamado a la Ley de Capitalidad
Sostuvo que uno de los grandes desafíos pendientes para Asunción es la aprobación de una Ley de Capitalidad, que permita al municipio contar con los recursos suficientes para sostener el nivel de obras e inversiones que requiere la ciudad.
Finalmente, reconoció el escenario adverso en la Junta Municipal, donde la oposición y la disidencia interna han conformado mayorías que impulsan su destitución.
“Sea cual fuere el informe, ya tienen los números. Esto es un juicio político y lo decidirán más allá de cualquier dictamen técnico”, aseguró.
Pese a este panorama, el intendente reiteró que se va con la conciencia tranquila:
“Día a día di lo mejor de mí. Apostamos a obras que quedarán para las futuras generaciones y, aunque para algunos haya sido poco o insuficiente, lo hicimos con compromiso, frontalidad y entrega total por Asunción”, concluyó.