Una planta procesadora de productos y subproductos de origen vacuno – Curtiembre, perteneciente a la Empresa Durli Leathers S.A, ubicada en la ciudad de Paraguarí, fue intervenida por fiscalizadores del Ministerio del Ambiente, al constarse dentro de los canales para aguas fluviales, la existencia de restos de efluentes generados durante la producción. Asimismo, una pileta de línea de pelambre sufría una pérdida de efluentes en tratamiento, hecho que podría afectar al suelo y agua. El hecho podría calificarse como una violación a la Ley 294 de Evaluación de Impacto Ambiental.
El director de fiscalización del ente Ambiental, Julio Mareco, informó que durante el recorrido por el local se pudo observar que todos los efluentes generados en la curtiembre son enviados a la planta de tratamiento, en el caso de los pelambres y el curtido, los mismos cuentan con un sistema de reciclado, luego de finalizado el proceso de tratamiento, el efluente final es vertido al cauce hídrico denominado Caañabé.
Por otra parte, comentó que los residuos sólidos que cuentan con restos de cromo son descargados en una fosa sanitaria con revestimiento impermeable y sello final, el lodo de la planta de tratamiento que no fue contaminado por cromo (residuos sólidos no peligrosos) es utilizado como abono orgánico para la fertilización del suelo y el agua utilizada en los procesos proviene de un pozo artesiano ubicado dentro del predio.
Todos los datos serán remitidos a la Dirección de Asesoría Jurídica para los trámites pertinentes para dictaminar los hechos constatados.
