Dos personas que estaban prófugas y con orden de captura tras el operativo “Brillante” se entregaron en la unidad anticorrupción. Son Porfirio Figueredo, funcionario de Aduanas y el oficial primero Alan Núñez, quienes prestaban servicio en Detave, según información de radio 780am.
Núñez se abstuvo de declarar, mientras Figueredo si lo hizo. Según el Fiscal René Fernández, los dos formarían parte de la estructura de recaudación paralela con las evidencias encontradas.
En las próximas horas se cumplirán las audiencias de imposición de medidas. El Fiscal indicó que una buena cantidad de funcionarios de DETAVE están involucrados pero no habló de una cantidad específica.