La Compañía Paraguaya de Comunicaciones (Copaco) S.A. y la Policía Nacional están trabajando en la elaboración de un convenio específico de cooperación interinstitucional para la prestación de servicio de seguridad y vigilancia, lo que llevará a que centenares de uniformados abandonen las calles para abocarse al servicio de la telefónica, en toda la república.
El documento que se encuentra en proceso para la firma, señala que Copaco pagará una “gratificación especial” a los uniformados, así como hará un “deposito especial” a la cuenta de la Policía Nacional, dejando como interrogante el destino final que tendrá estos «fondos especiales».
Según el documento, la solicitud de cobertura policial surge a partir de una comunicación recibida por la Dirección de Contrataciones Públicas que advierte a las instituciones estatales y municipios a que antes de contratar servicios de seguridad privada deben consultar la posibilidad de acceder a cobertura policial, al Ministerio del Interior.
Dentro del Convenio se prevé que la policía provea a Copaco de los personales policiales necesarios para el servicio ordinario de vigilancia, control y seguridad de las instalaciones acordadas, durante 24 horas, incluso los domingos y feriados.
Inicialmente el documento de acuerdo tendría una vigencia de 3 años, conforme el borrador al que accedimos.
Surge la interrogante sobre el pago que recibirán los uniformados, si será legitimo o no, ya que la ley de función pública prohíbe a sus miembros recibir «obsequios, propinas o comisiones, o aprovechar ventajas en razón del cargo para , ejecutar, abstenerse a ejecutar, ejecutar con mayor empeño o con retardo cualquier acto inherente a sus funciones».