Tal como advirtió la Policía Nacional en la víspera que no iba permitir el cierre de las principales arterias de la capital, en cumplimiento a las normativas que hablan del derecho al libre tránsito, los uniformados procedieron hoy a despejar la avenida Mariscal López, bloqueada por los manifestantes.
La resistencia de los mismos llevó a la policía a utilizar los carros hidrantes y balines de goma, hecho que arrojó como resultado decenas de heridos, entre los que se encuentran incluso trabajadores de prensa que se encontraban realizando coberturas en el sitio.
Al percatarse de la presencia de antimotines con intenciones de realizar el despegue de la avenida, los manifestantes procedieron a arrojar piedras y otros objetos contundentes intentando repeler el despeje.