Tras varios intentos por destrabar la huelga anunciada por un lado, por Guardiacárceles y por el otro, por los funcionarios del Registro Civil, finalmente se confirmó el inicio de la medida de fuerza, a partir de esta media noche.
Los guardiacárceles exigen el aumento salarial del 30% a partir del próximo año, al igual que los funcionarios del Registro Civil que también reivindican la necesidad de aumentar sus ingresos.
Con esta decisión, el Ministerio de Justicia entrará a trabajar con los miembros de la Policía Nacional para brindar seguridad ea las penitenciarias, ya que el 50% de los guardiacarceles van a la medida de fuerza.
Por su parte, los funcionarios del Registro Civil anuncian que habilitaran los «Registros móviles» que atenderán sólo los casos considerados de urgencia.