El Ministerio Público supervisó la erradicación de 2 hectáreas de marihuana que fueron cultivadas en un predio rural de la zona de Ñacunday, del departamento de Alto Paraná. Las acciones corresponden a la inspección de terrenos de los que se valen los traficantes para iniciar la cadena de producción ilícita.
Dentro de los campos o extensiones rurales a ser intervenidos, la SENAD, preparó un contingente compuesto por Agentes y miembros de las Fuerzas Especiales, quienes alcanzaron a destruir alrededor de 6mil 500 kilos de marihuana.
En los alrededores del lugar no fue hallado campamento alguno.
Como parte de la actividad, se procesaron todo tipo de informaciones relacionadas al movimiento del narcotráfico con base en cultivos ilícitos sembrados en establecimientos rurales junto con el fiscal Abg. Manuel Rojas y sus asistentes.