En el marco de la sesión ordinaria del Consejo Permanente de la OEA, Paraguay reafirmó su preocupación ante decisiones sobre notificaciones rojas de Interpol que atentan contra los esfuerzos de países de poner a disposición de la justicia a personas prófugas.
Este pronunciamiento fue realizado en el marco del punto de orden del día referido a la “Declaración sobre las notificaciones rojas de Interpol en relación con el atentado a la AMIA”, que fue suscrita por 18 Estados Miembros de la OEA, entre ellos el Paraguay.
En la ocasión, las delegaciones dijeron estar alarmadas por la presencia en Nicaragua, en fecha 10 de enero de 2022, a invitación del presidente Daniel Ortega, del ciudadano iraní Mohsen Rezaei, quien posee una notificación roja de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), por su presunta participación en el atentado del 18 de julio de 1994 contra la Asociación Mutual Judía de Argentina (AMIA), en Buenos Aires, causando el fallecimiento de 85 personas.
En representación de la delegación paraguaya, el representante interino del Paraguay, ministro Raúl Martínez, recordó que el Estado paraguayo soportó dos situaciones similares: en el 2019, cuando la Comisión de Control de los Ficheros de la Interpol, en forma inconsulta y sin otorgar justificaciones, dispuso el levantamiento provisional de la notificación roja respecto de los ciudadanos paraguayos Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán.
Estas personas, procesadas por secuestro, continúan prófugas de la justicia desde el 2003. Dicha notificación roja estuvo vigente hasta que en el 2019 fuera levantada, sin justificación alguna. Esto posibilitó el traslado de estas personas desde Uruguay hasta Finlandia en carácter de reasentados.
También se mencionó que el 19 de octubre de 2021, Rodrigo Granda viajó desde Colombia a otro país desde el continente y, a pesar de existir una notificación roja en su contra, no fue detenido, sino que se lo mantuvo a resguardo para posteriormente indicarle que debía volver a su país para evitar la detención, lo cual sucedió finalmente.
Granda sigue procesado en Paraguay en una causa donde se investiga la supuesta comisión de homicidio doloso, secuestro y asociación criminal, por ende contaba igualmente con orden de captura internacional y notificación roja vigente.
Finalmente, se instó a los Estados Miembros de la Interpol a realizar una profunda reflexión sobre la actuación de la organización en algunos casos que dañan su credibilidad y que atentan contra la seguridad de la región, informó la Cancillería Nacional.