La Policía Nacional investigará cada incendio a fin de determinar la identidad de los responsables, quienes de acuerdo a la ley N° 6.779 se exponen a pena privativa de libertad de hasta dos años o multas.
La ley N° 6779, sancionada en octubre del 2021, que tipifica como hecho punible la producción de incendios que afectan el medio ambiente y atentan contra la seguridad de las personas frente a riesgos colectivos, dispone que la Policía Nacional bajo dirección del Ministerio Público investigue los siniestros y llegue a los responsables.
A fin de determinar la identidad de los mismos, podrán solicitar la colaboración del personal Bombero de la zona aledaña al lugar del hecho, en relación a técnicas propias de investigación de incendios.
Esta normativa expresa que aquellos que actúan dolosamente o con intención, causando incendios que afecten bosques, palmares, pastizales, matorrales, montes, cerros, plantaciones agrícolas y forestales humedales, ganado, vida silvestre, campos comunales, rellenos sanitarios u otros lugares de disposición de residuos, parques urbanos, núcleos de poblaciones o lugares habitados, serán castigados con pena privativa de libertad de hasta cinco años o con multa.
Asimismo, las personas cuya conducta culposa, es decir sin intención, ocasione riesgo de incendio, serán castigados con pena privativa de libertad de hasta dos años o con multa. Los que incineren basuras u otros desperdicios de cualquier tipo en rutas, caminos o calles, cursos de agua o sus adyacencias, serán sancionados con pena de multa.
Cabe mencionar que los incendios pueden afectar gravemente nuestros bosques y los animales que estos albergan, así como riesgos a la vida humana, por lo que se debe evitar cualquier acción que represente un riesgo de incendio.
Desde el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible apela a la conciencia ciudadana para evitar actos que suponen mayor riesgo de incendio, como lo son por ejemplo las quemas de basura, las fogatas u otras acciones igual de peligrosas e irresponsables, ya que con las condiciones climáticas actuales solo basta una chispa para generar incendios de proporciones inimaginables.