Los Centros para el Control de Enfermedades calificaron a esos países en la categoría 4 de alerta, definida como de riesgo “muy alto”, por el nivel de contagios. Otros ocho estados latinoamericanos ya estaban en esa escala.
El Gobierno de Estados Unidos situó este lunes a México, Brasil y otros países y territorios en la categoría 4 de transmisión del coronavirus, definida como de riesgo “muy alto”, ante lo que aconsejó a sus ciudadanos no viajar a esos países.
Además de México, Chile y Brasil, los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) también metieron en esa clasificación a Ecuador, Paraguay, Perú, Filipinas, San Vicente y las Granadinas, Singapur, Moldavia, Kosovo, Anguila y la Guayana Francesa.
En el caso de México, el país norteamericano llevaba seis meses en la categoría de nivel 3 de riesgo “alto”, pero el avance del virus durante las últimas semanas lo han llevado a subir de categoría.
El nivel 4 supone un aviso de “no viajar” al país en cuestión y, si resulta imperativo llevar a cabo ese viaje, los CDC recomiendan estar completamente vacunado y alertan de que aun así se corre el riesgo de contagiarse de COVID-19.
De los países de la región, ya figuraban en esa categoría Colombia, Argentina, Bolivia, Venezuela, Uruguay, República Dominicana, Costa Rica y Panamá.
Para el caso de Chile, se encuentra en vigor desde este lunes la alerta de nivel 3, que insta a “reconsiderar el viaje”, no solo debido a la complicada situación epidemiológica, sino también por a las “tensiones civiles”.
Este mismo lunes, la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, en inglés) aprobó totalmente la vacuna anticovid de Moderna, que tenía hasta ahora autorización para uso de emergencia.
En un comunicado, el regulador estadounidense explicó que tras esta medida la vacuna pasará a ser comercializada bajo el nombre de Spikevax “para prevenir el COVID-19 en individuos de 18 años y mayores”.
El suero de Moderna fue aprobado para uso de emergencia en EEUU para los mayores de edad el 18 de diciembre de 2020, y es la segunda vacuna contra el COVID-19 que obtiene el visto bueno completo de la FDA después de la de Pfizer.
La comisionada saliente de la FDA, Janet Woodcock, destacó que la aprobación completa “puede que infunda una mayor confianza a la hora de adoptar la decisión de vacunarse” entre la población.
Según datos de los CDC, más de 211 millones de personas (63,8 % de la población) han recibido la pauta completa de la vacuna, mientras que 87,8 millones (41,5 %) se han puesto la dosis de refuerzo.
Fuente: Infobae.com