Este lunes 5 de agosto arrancará, oficialmente, la implementación del programa Hambre Cero, que llevará alimentación a los niños y niñas de las instituciones públicas de todo el país.
El presidente Santiago Peña resaltó que este programa generará una transformación no solamente para los niños, la nutrición, la retención escolar, sino también va a generar un ingreso económico muy importante y agregó que se trata de un programa emblemático del Gobierno al igual que Che Róga Porã.
El Ejecutivo estableció distritos prioritarios, que son los más vulnerables identificados según indicadores sociales, para iniciar la implementación del programa en todos los departamentos del país, bajo la ejecución del Ministerio de Desarrollo Social (MDS).
En una primera fase se prevé llegar a 2.627 instituciones educativas, lo que representa, aproximadamente, 450.000 alumnos matriculados. Pero para el año próximo se busca universalizar el servicio de alimentación escolar y llegar a todos los distritos del país.
Por su parte, el ministro de Educación, Luis Ramírez, explicó que no solamente se dará alimentos a los niños, que le van a dar la energía para aprender, sino también es un fenómeno que va a desarrollar la economía en las localidades, ya que los proveedores serán también los pequeños productores y las mipymes locales.
En este contexto, el Gobierno viene desarrollando rondas de negocios con los productores locales, de manera que eso deje una posibilidad de desarrollo en la zona.
Ramírez agregó que el programa Hambre Cero representa un gran y complejo desafío para toda la estructura de salud del Gobierno se pone también a disposición de la escuela de los niños y de la familia.
