Ante el anuncio de la marcha de la Federación Nacional Campesina, autoridades del Ministerio del Interior aseguran que intentarán evitar el uso de la fuerza pública para evitar los cortes de rutas.
La intención es no permitir la violación de los derechos de terceros al libre tránsito, aunque si las organizaciones campesinas proceden a realizar los cortes, se verán obligados a usar las fuerzas públicas para el despeje.
La información que se maneja en ámbito del Ejecutivo es que existe un plan de desestabilización en contra del gobierno de Mario Abdo Benítez.
El ministro del Interior Euclides Acevedo insistió que apelarán al diálogo con los organizadores de la marcha para evitar enfrentamientos.
«Nadie quiere recurrir al uso de la fuerza, es un trabajo desagradable, pero si nos obligan tendremos que hacerlo», manifestó el secretario de estado.
