El Ministerio de Salud de Brasil reportó este miércoles que en las últimas 24 horas se produjeron 449 nuevas muertes por el Covid-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, lo que elevó el total a 5.466.
La cifra es la segunda más alta registrada en el país desde el inicio de la pandemia, solo detrás de los 474 decesos de la víspera. En tanto, la cantidad de nuevos casos registrados fue de 6.276, lo que elevó el total a 78.162.
Hubo 6.276 nuevos contagios confirmados, un aumento del 9% con respecto al martes.
San Pablo fue una vez más el estado más afectado por la pandemia y alcanzó los 26.158 casos confirmados con 2.247 muertos. Luego le siguen Rio de Janeiro, con 8.869 contagios y 794 muertos, Pernambuco (6.194 contagios y 538 muertos) y Amazonas (4.801 contagios y 380 muertos).
El pico de la pandemia se espera que se produzca entre mayo y junio en Brasil, que tiene 210 millones de habitantes y donde se sospecha que existe una enorme subnotificación de casos por la falta de test.
A fin de intentar minimizar esas carencias, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), vinculada al Ministerio de Salud, anunció este martes que ha autorizado la realización de los llamados test rápidos en farmacias, aunque subrayó que ese tipo de pruebas no representan un diagnóstico completo.
“¿Qué quieren que haga?”
Luego del récord de muertes registrado el martes, el presidente Jair Bolsonaro, un reconocido crítico de las cuarentenas y las medidas de aislamiento social, volvió a generar polémica. Consultado sobre estas crecientes cifras y la aceleración de los contagios -el último parte registró más de 5.000 y el total es de casi 72.000- el mandatario respondió: “Lo lamento, pero ¿qué quieren que haga?”.
“¿Y entonces?”, agregó Bolsonaro frente a la insistencia de los periodistas, para agregar que, aún cuando su segundo nombre es Mesías, no es capaz de “hacer milagros”.
Este miércoles, en cambio, responsabilizó a los gobernadores y alcaldes del país, que han sido los impulsores de adoptar medidas de aislamiento, del aumento de las muertes por el COVID-19 en el territorio brasileño. En concreto, apuntó a las autoridades de San Pablo, el estado más afectado por la pandemia y cuyo gobernador, Joao Doria, se ha convertido en una de las caras visibles de quienes promueven una estrategia opuesta a la de Bolsonaro.
“Esa factura tiene que ser enviada a los gobernadores. Pregunten al señor Joao Doria [gobernador de San Pablo], al señor [Bruno] Covas [alcalde de San Pablo] por qué han tomado medidas tan restrictivas y continúa muriendo gente”, dijo Bolsonaro en la puerta del Palacio de la Alvorada, su residencia oficial en Brasilia.
“Ellos tienen que responder. Ustedes no van a cargar en mis espaldas esa cuenta”, añadió dirigiéndose a los periodistas.