La OPS recomendó seguir aplicando las vacunas de AstraZeneca pese a los temores sobre posibles efectos adversos

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) recomendó este miércoles seguir aplicando las vacunas contra el COVID-19 de AstraZeneca, bajo revisión por su posible vinculación con casos excepcionales de coágulos sanguíneos y suspendidas definitivamente en Dinamarca por “infrecuentes” pero “graves” efectos secundarios.

La directora de la OPS, Carissa Etienne, dijo en rueda de prensa que el organismo, que es una agencia regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS), está atento a los procesos de vigilancia.

“Agencias regulatorias están revisando reportes infrecuentes de coágulos de sangre entre personas con niveles bajos de plaquetas revelados por sólidos sistemas de vigilancia de vacunas, y esperamos recomendaciones adicionales pronto”, señaló.

“Mientras tanto, es importante seguir administrando las vacunas AstraZeneca allí donde estén disponibles”, dijo.

“Casi 200 millones de personas en todo el mundo han recibido la vacuna contra el COVID-19 de AstraZeneca y los informes de efectos adversos son muy infrecuentes”, añadió.

Dinamarca decidió descartar definitivamente la vacuna de AstraZeneca por sus poco habituales aunque “graves” efectos secundarios, anunciaron este miércoles las autoridades sanitarias.

Pero la mayoría de los países europeos que habían suspendido el uso de esta vacuna han reanudado su utilización, aunque estableciendo un límite de edad. Noruega anunciará su decisión el jueves.

Expertos en inmunización de la OMS dijeron la semana pasada que un vínculo causal entre esta vacuna y la aparición de coágulos fue considerado “plausible pero no confirmado”, y agregaron que los casos informados eran “muy infrecuentes”.

El balance riesgo-beneficio sigue “muy a favor de la vacuna”, dijo entonces un portavoz de la OMS a la AFP.

Los especialistas indicaron que continuarán examinando nuevos datos y publicarán nuevas recomendaciones “si es necesario”.

La inmunización de vector viral de AstraZeneca es por ahora una parte crucial de la cartera del Covax, el mecanismo liderado por la OMS para adquirir vacunas anticovid y garantizar su acceso equitativo en todo el mundo.

Etienne dijo que, desde marzo, el Fondo Rotatorio de la OPS ha ayudado a distribuir más de tres millones de dosis en nombre del Covax a 28 países de las Américas.

Sudáfrica también renunció a AstraZeneca en febrero, pero por otros motivos ya que está en duda su eficacia ante la variante que asola el país.

Estados Unidos, al igual que Suiza, todavía no la autorizó, y Venezuela se negó a hacerlo invocando sus efectos secundarios.