La Entidad Binacional Yacyretá inició hoy los trabajos de adecuación de la Línea Paraguaya 2 (transmisión 500 kV Ayolas-Villa Hayes); y que consisten en la transformación de la actual salida de 220 kV a 500 kV, con una potencia nominal de 1732 MVA.
Esto permitirá al Paraguay disponer del 50% de la energía que por tratado le corresponde, del total que produce Yacyretá.
Durante el acto que se llevó a cabo en la Central Hidroeléctrica, que contó con la presencia del mandatario Mario Abdo Benítez, el director de la EBY, Nicanor Duarte Frutos, señaló que las tareas marcan el inicio de la lucha crucial por la soberanía energética.
“Se habló mucho de la soberanía energética en el discurso político, pero la verdadera soberanía empieza hoy, presidente”, dijo dirigiéndose al jefe de Estado.
Acotó que el gobierno de Abdo Benítez va a habilitar esta herramienta que nos va a permitir tener un horizonte mucho mejor para nuestro desarrollo como país.
Duarte Frutos aseguró que la soberanía de un país pasa también por el modelo económico. “Somos un país agroexportador, muy competitivo en esa rama, pero paralelamente al modelo que debe ir avanzando cada día con mejores productos para mercados globales exigentes, tenemos que avanzar también sobre un modelo agroindustrial”, manifestó.
Agregó que de esa manera, la energía de la que vamos a disponer, podremos volcar hacia un desarrollo industrial favoreciendo a pequeñas y medianas industrias que son las que generan empleos.
“La soberanía energética va a pasar por disponibilidad de más desarrollo industrial que genere empleo estable y decente para miles de jóvenes”, dijo al tiempo de agregar que este es el compromiso asumido por el presidente de la República “y en el cual estamos involucrados los que amamos a la Patria”.
Insistió en que cuando se unan disponibilidad y un modelo económico alternativo al agroexportador “la soberanía realmente iremos logrando”.
Recordó que mucho en el pasado se discutió sobre la venta de energía, pero para que ello ocurra se necesita una línea de transmisión. “No tenemos que pensar en el rentismo hidroeléctrico. Nuestra energía tenemos que utilizar totalmente en el Paraguay, en el marco de una política estratégica de mediano y largo plazo para nuestro desarrollo sostenible”, finalizó.