Tras el bochornoso espectáculo vivido ayer durante la reunión de la comisión de Asuntos Constitucionales luego de la reacción que tuvo el senador Paraguayo Cubas contra el Comisario Aurelio Marín, el alto jefe policial se defendió, desmintiendo a Cubas.
Negó su responsabilidad en la agresión policial a manifestantes en Ciudad del Este, entre los que se encontraba la esposa del parlamentario y rechazó la afirmación sobre que recibía dinero de narcotraficantes a cambio de protección policial.
Marín aseguró además que ya cumplió con los años de servicio para acceder al ascenso y descartó estar con sobrepeso, tal como afirmó Cubas.