El presidente de la república Mario Abdo Benítez destacó en su informe ante el Congreso la lucha implacable emprendida por el Gobierno para combatir al narcotráfico y el crimen organizado. Indicó que esta lucha se tradujo en la expulsión de más de un centenar de crimínales transnacionales.
“Tenemos presente que el narcotráfico es un rival que no descansa, pero, aun así, en tan solo 9 meses logramos dar un duro golpe a este negocio criminal con la incautación de 3500 kilos de cocaína y la destrucción de 317.895 kilos de marihuana”, resaltó.
“Golpeamos y seguiremos persiguiendo al tráfico de drogas y a todas sus manifestaciones delictivas conexas, como lo son el secuestro y el sicariato. Operativos como Berilo y Polaris conllevaron la incautación de más de 2 toneladas de cocaína, cifra que, sumada a todos los demás resultados que obtuvimos, provocaron una pérdida de más de 100 millones de dólares para la delincuencia organizada. Operaciones como estas nos han permitido capturar y expulsar de nuestro territorio a 120 integrantes de distintos grupos criminales internacionales” detalló el Presidente de la República ante el pleno del Congreso.
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo resaltó asimismo como un logro histórico la absolución de Paraguay en la demanda ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
“El día que asumí, manifesté que mi lucha contra el narcotráfico, el contrabando y el secuestro no se detendría. En tal sentido, hace unas semanas nuestro país obtuvo un logro histórico, y a pesar de los pronósticos adversos, se hizo justicia. La Corte Interamericana falló a favor del Estado paraguayo en el caso Arrom y Martí, declarando que no es responsable de haber violado la Convención Americana de Derechos Humanos”, significó.
Destacó el trabajo realizado por la Procuraduría General de la República, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio Público, el Ministerio del Interior, los testigos, las víctimas y los familiares, la prensa y la sociedad civil que se movilizó en la campaña “Ni un dólar para el secuestro”, convirtiendo a este caso en una causa nacional que unió a todos los Paraguayos.
