La diputada Esmérita Sánchez, presidenta de la comisión de Derechos Humanos, dijo que tanto Juan Arrom, como Anuncio Martí, debieron agotar las instancias en nuestro país, y si realmente eran inocentes, demostrarlo con pruebas.
Cabe recordar que tanto Arrom, como Martí, denunciaron al Estado paraguayo, ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos por supuesta privación de libertad y tortura. Ambos pretenden que el país les pague aproximadamente USD 63 millones, en concepto de indemnización, que serán distribuidos entre ambos y sus 22 familiares.
Igualmente, exigen que una de las calles de Asunción lleve sus nombres, como así también, la construcción de un museo contra la tortura y el pago de los tratamientos psicológicos recibidos.
“Creo que es justo y necesario que los acusados acudan a nuestro país y enfrenten esta situación, para defenderse, si realmente son inocentes”, dijo la parlamentaria, al tiempo de agregar que, “es una situación muy compleja; en la comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, lastimosamente, no tratamos este tema porque estamos de receso parlamentario”.
Respecto a la suma de 50 millones de dólares, que pidió Juan Arrom como reparación simbólica por todo el supuesto daño moral, sicológico y físico, así como la estigmatización que sufrió en torno al caso del secuestro de María Edith Bordón de Debernardi, la legisladora, indicó que “primero se tiene que estudiar, analizar y decidir en nuestro país si corresponde o no lo que están solicitando. Respeto mucho a los Organismos Internacionales, pero nuestro país debe revisar el caso y verificar si realmente son víctimas o responsables por el hecho que ocurrió”, finalizó.