Unas 60 delegaciones internacionales, representantes del sector privado y decenas de ONG y miembros de la sociedad civil fueron convocados a la Conferencia Mundial de la Crisis Humanitaria en Venezuela, que se desarrolla en la sede de la OEA en Washington.
El líder opositor David Smolansky destacó la predisposición de la OEA y de la comunidad internacional para ayudar a su país. Afirmó que el evento recaudó 100 millones de dólares para ayuda humanitaria, que serán utilizados para medicamentos y alimentos.
«Para nosotros es un día muy importante como venezolanos, reunir tanta gente para la Conferencia Mundial de Ayuda Humanitaria. Gracias a la OEA por facilitar este espacio para podernos reunir», expresó.
La médica y profesora Marianela Herrera, brindó datos sobre la desnutrición: «Hay un aumento de las personas subnutridas de un 5% a un 11% en Venezuela. Hay desnutrición crónica que comienza en mucho de los casos desde el embarazo porque los venezolanos no pueden acceder a los alimentos».
«Existe un brote de diarrea en uno de los estados del oriente venezolano. La ayuda humanitaria tiene que ingresar ya, la gente no puede esperar, los venezolanos se nos están muriendo», pidió.
El estadounidense Elliott Abrams afirmó que Venezuela sufre de la crisis humanitaria más seria de la historia de la región. «La escala de la crisis es abrumadora. Cualquier solución a la crisis venezolana debe comenzar con la partida definitiva del régimen de Maduro», afirmó.
«EEUU apoya firmemente el gobierno legítimo de Guaidó y hemos respondido su llamado a ayuda humanitaria, tan necesaria», detalló.
El pulso por el poder se centra actualmente en la asistencia humanitaria estadounidense bloqueada en la frontera de Colombia por Maduro, quien la considera una excusa para iniciar una intervención militar que lo saque del poder.
Venezuela atraviesa en los últimos años una debacle económica marcada por la hiperinflación y la escasez de insumos de primera necesidad, que la oposición atribuye al gobierno de Maduro.
Millones viven en la pobreza, mientras al menos 2,3 millones huyeron del país desde 2015, según la ONU, que considera este éxodo el mayor en la historia reciente de América Latina.
Estados Unidos prometió el 24 de enero asistencia humanitaria a la población de Venezuela por 20 millones de dólares, en tanto la semana pasada Canadá anunció unos 40 millones y la Unión Europea, 5,7 millones.
Fuente: Infobae.com
