Comunicado mediante, la cancilleria de nuestro país condena enérgicamente las amenazas de ex dirigentes y militantes de las FARC-EP de retomar la vía armada como método de participación en los asuntos públicos, en abierta violación del acuerdo alcanzado en 2016; y «deplora» la instigación, colaboración y el apoyo que viene proporcionado a este y otros grupos criminales el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro.
Igualmente, apoya los esfuerzos realizados por el Gobierno de Colombia en beneficio de la preservación de la paz y la seguridad interna del país y de la región, y rechaza toda amenaza criminal que pretenda poner en vilo los procesos vigentes en el hermano país.
Señala adempas que «el empeño del gobierno colombiano apunta a acabar con los enfrentamientos armados, la delincuencia organizada, el terrorismo y otras actividades criminales». El Gobierno reitera su pleno respaldo al proceso de paz en Colombia y aboga por el respeto y cumplimiento de los acuerdos sellados a finales de 2016.
