El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, firmó el decreto que dispone la disolución del congreso y la convocatoria a nuevas elecciones generales. La decisión del mandatario sucedió luego de que se defendiera ante el congreso en el juicio político en su contra. El presidente usó la causal dispuesta en la constitución de grave crisis política y conmoción interna.
El decreto 741 firmado por Lasso se difundió alrededor de las 07h00 (hora local). El mandatario utilizó el recurso Constitucional, contemplado el artículo 148, conocido popularmente como muerte cruzada. En un mensaje a la nación, Lasso aseguró que “todos los esfuerzos del poder legislativo buscan desestabilizar al gobierno con un juicio infundado”.
Según la Constitución de Ecuador, el mandatario podrá invocar este recurso “cuando, a su juicio, (la Asamblea Nacional) se hubiera arrogado funciones que no le competan constitucionalmente, previo dictamen favorable de la Corte Constitucional; o si de forma reiterada e injustificada obstruye la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo, o por grave crisis política y conmoción interna”. Esta es la primera vez que un mandatario activa este recurso.
Lasso también acusó a los legisladores de ser parte de un proyecto desestabilizador: “Resulta inaceptable que el gobierna cumpla con su agenda de 4 años en apenas 12 meses”, dijo el mandatario en referencia a que en menos de dos años de gestión a enfrentado al menos tres intentos de destitución y derrocamiento.
Además, indicó que la Asamblea Nacional ha acosado políticamente a sus ministros, pues la oposición en el legislativo ha realizado 14 enjuiciamientos políticos en contra de los secretarios de Estado. Según Lasso, desde el congreso se trató de obstruir su plan de trabajo propuesto para su periodo presidencial.
Con la decisión de disolver el congreso y convocar a elecciones anticipadas, Lasso deberá gobernar bajo decretos ley que deberán pasar por el control de la Corte Constitucional. Esto hasta que se realicen los nuevos comicios. Lasso informó que firmó el primer decreto ley para el Fortalecimiento de la Economía Familiar “con el que bajamos los impuestos a las familias, a los negocios populares, a los taxistas y artesanos”, según indicó y anunció que lo enviará al alto tribunal constitucional para que emita su dictamen favorable.
Con la decisión de Lasso, los legisladores deberán abandonar sus curules. Si no lo hacen, incurrirían en desacato por lo que la Fiscalía y la Policía podrían detenerlos en flagrancia y obligarlos a dejar la sede del Legislativo.
Fernando Villavicencio que fungía como presidente de la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional felicitó la decisión del presidente Lasso y dijo que “hoy es un día de fiesta nacional” y que el mandatario “finalmente escuchó la voz del pueblo”.
Desde la tarde del 16 de mayo, los miembros de las Fuerzas Armadas se encontraban concentrados en sus cuarteles a la espera de disposiciones. Esta mañana, el paso hacia la sede del Legislativo, en Quito, está bloqueado y hay un fuerte resguardo militar y policial en la zona.
El expresidente Rafael Correa aseguró que la decisión de Guillermo Lasso es ilegal. Para Correa, que ha sido acusado de “conspirador” por el actual mandatario, la disolución del congreso sucedió porque Lasso “no pudo comprar suficientes asambleístas para salvarse”. Sin embargo, el 19 de abril de este año, el movimiento Revolución Ciudadana pidió que Lasso expida e la muerte cruzada por existir una “grave crisis política y conmoción interna”, la misma causal que ha ocupado Lasso en su decreto expedido este miércoles.
Por su parte, la Confederación de Nacionalidades Indígenas calificó a la situación de Ecuador como “un escenario de dictadura de Guillermo Lasso” y convocaron a sus bases a “a mantener la unidad en cada estructura organizativa a nivel nacional, se convocará en las próximas horas a un consejo ampliado extraordinario para el análisis y la toma de decisiones colectivas”.
El jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Nelson Proaño, indicó que la decisión de Guillermo Lasso de disolver la Asamblea Nacional se fundamenta en la Constitución, por tanto “debe ser respetada total y completamente por todos los ciudadanos”. Recordó que las FF.AA. “son obedientes y no deliberantes”.
“El país no aceptará ningún intento de alterar el orden constitucional a través de la violencia para atentar contra la democracia. En ese caso las FF.AA. y la Policía Nacional actuaremos con firmeza para proteger la vida y los derechos de los ecuatorianos”, aseveró Proaño y llamó a la unidad.
Fuente: Infobae.com